Ir al contenido principal

¡Lee, pero porque te guste!


Eso es, lee. Pero no lo hagas por obligación. No lo hagas porque sientas que debes hacerlo.

Lee porque disfrutas haciéndolo. Lee porque piensas que si no lo hicieras no serías tú. Que estarías incompleto.

Lee porque quieres viajar. Porque quieres conocer otros mundos. Otros lugares. Lee porque a veces necesitas escapar un momento de tu realidad.

Lee porque quieres tener tus propios conocimientos. Lee porque quieres tener tu propio pensamiento. Y no dejar que los demás decidan por ti.

Lee porque sientes. Sí, has leído bien. SIENTE. Hazlo cuando un personaje sufre, cuando es feliz, cuando se enamora.
Cuando está frustrado porque no consigue lo que quiere. O la satisfacción que obtiene porque sí lo  consigue.

Sí, lee. Pero no porque te lo pida tu profesor de literatura. Lee porque así es como lo siente tu corazón y es lo que te pide tu mente.
Si lo sientes así, cada vez que veas un libro con muchas páginas no pensarás "¿Y tengo que leerme todo esto?" Sino que dirás "Quiero saber qué me tiene que contar".

Cada libro tiene su historia y si consigues llegar a ella es cuando te empezará a gustar de verdad.

¡Y hasta aquí el post de hoy! Espero de verdad que os haya gustado mucho. Aportad todas vuestras opiniones a través de los comentarios, estaré encantada de responder.
Arriba tenéis mis redes sociales. ¡Podéis seguirme y contarme también por ahí todo lo que pensáis vosotros!

Y ya sabéis ¡STAY BOOKISH!

Comentarios